El centro de mi casa es algo particular
Permanece intacto a pesar de las tristezas
Una vez lo vi plagarse de verde
Cuando un tornado le despegó el cemento
Una tormenta de aire implacable
Llegó con decisión y todo lo transformó

Hay una luz tenue que no desvanece
Permanece,
Constante
Y segura
Esa serenidad que le da la creación original
Que nunca muere
Porque nunca nació
Cada vez que allí entro contemplo el silencio
Y llevo mi dedo índice al pecho
Cuando quiero abrir su puerta.
Espartaco ya no lucha a muerte en la arena del circo romano, ni asesina a sangre fría enemigos y leones africanos para complacer los caprichos del César, salvar su pellejo y convertir su nombre en leyenda. En el siglo XXI, se juega la vida sobre el filo de la infalible luz roja del semáforo, toreando en el asfalto de las horas pico legiones de carros envenenados, imponiendo al Mesón de los Búcaros su honroso trono de hambre, sudor y anonimato.Espartaco cambió su poderosa espada y su feroz caballo por una bicicleta de panadero y unos chacos anaranjados. Todavía conserva la cara de gladiador, tiene pinta de bailarín de tango, un clavelito amarillo en la camisa y mística de gitano. Galantería de picaflor no le falta. Y quién lo creyera, el hombrecito no come bestias, resultó vegetariano. Espartaco en el siglo de las ilusiones ya no se llama Espartaco, aunque siga siendo el alma guerrera de siempre. En esta nueva era hubiera podido llamarse Alirio, Esteban o Sandro, como pudo ser albañil, domador de leones o luchador grecorromano. Pudo ser una vez más el redentor de los oprimidos, liderar la rebelión y derramar más sangre por su mano. A cambio de eso escogió celebrar en silencio la vida mientras la ciudad sorda ignora el ritmo de sus pasos. Como haya sido, él bien sabe que al final de la jornada, el mayor de los triunfos y la mayor de las glorias es llegar a casa, con pocos pesos en el bolsillo, pero salvo y sano.

Título: Bailarín de acequias
Para: La Tigra
De: El Tigre
Fecha: hace más o menos un año
Bailo
En la calle bailo
A mi modo
Dando salticos
de vereda en vereda
Como el tigre
ensayando en la jungla
Bailo
Tanteo el terreno
y brinco
persiguiendo muritos
Como el tigre
persiguiendo mosquitos
Bailarín de acequias
acecho las fuentes
y salto
amante de la acrobacia
Como el tigre
dichoso en el agua
Bailo
en la calle bailo
a mi modo
Dando salticos
Como el tigre
ensayando en la jungla
*
No sé si realmente aprendí algo en sentido estricto. Tal vez, mejor, confirmé cosas:
1. que me gusta estar solo, empeloto y miquiando (vecino, vecina ¿ustedes qué opinan?)
2. que puedo limpiar neveras (a pesar de las críticas)
3. que, finalmente, si me ha gustado leer El Hotel New Hampshire y La Peregrinación de Alpha (Gracias loquita)
4. que me fascina, me enloquece, me despierta, me eleva el regué (Estamos pidiendo que del fuego la llamarada, limpie la atmósfera que está contaminada)
5. que me fortalece, me enchufa, me danza, me energiza la capoeira (Angola ee, Angola, Angola ee, Angola)
6. que, a pesar de todo, me gusta el trabajo que hago (por don Jerry, que es yo mismo)
7. que, finalmente, si cocino rico (una receta: tallarines con champiñones y brócoli bañadito en aceite de oliva. Suena elegante, cierto?)
8. que la pasé rico contigo (¿conmigo?)
9. que soy feliz siendo medio hippie (los extremos no son recomendables, a lo bien)
10. que me gusta esta ciudad (me gustas tú)
*
[Mis manos // abren las cortinas de tu ser // te visten con otra desnudez // descubren los cuerpos de tu cuerpo // Mis manos inventan otro cuerpo a tu cuerpo.] Palpar - Octavio PAZ
*
volar.

**
Vio que la noche era como las otras, él decidió caminar bajo la lluvia por la avenida que estaba como siempre abarrotada de carros y colores, justo ahí se detuvo, con la boca entreabierta y los ojos fijos en ningún lugar, recordó que el año pasado había sido exactamente igual, el mismo abrigo negro, el cabello húmedo, los viejos zapatos de tela. Apretó los labios y lloró, levantó las manos para taparse la cara y recordó las caricias del hombre que en esa misma esquina lo
abandonó.

Después de la guerra los muros se vieron más grises, ambos estábamos envueltos por los años que aún no vivíamos, él, un hombre negro cansado de las pocas palabras de las trincheras, me miró y entendió que la revolución había nacido ya, callaba su arma para educarme, levantó mis manos, miró las ruinas y entendió el significado de la
esperanza.

**
Escritos de: Juli - Ch+ - 7Jon - IIme Ilustraciones: esquizopedia - Annie Leibovitz - manos de google Al lector: gracias por todo - por cada cosa Al pasado: la espalda - la memoria Al presente: un abrazo - tal vez dos Al futuro: ni un minuto de especulación - no se si llegarás.
6 comentarios:
ay juemadre que bonito todo esto!!!
habiendo visitado varias veces la casita, nunca me he tenido a comentar, ni siquiera en la época de instrucciones para darte una palabra,¡que tonto!. hoy agradezco a la vida y a ustedes por ese cumulo de frases, que chimba... El centro fue mi preferido.. que vengan tormentas de aire para todos...bendiciones
amiguitos y amiguitas, esto es una BELLEZURA.
...de verdad tengo sueño. Estoy cansado. Son las 17:35 y los ojos me flaquean... Y ustedes aparecen...
Los labios no se mueven. Sin embargo en mi cabeza una sonrisa aparece
The center
!I'm still dancing in that center!
And that movement
full of those symbols of pure love, penetrate my mind without restraint,'cause I let them, 'cause I want it, cause it's too sweet. And its tenderness let the door open to the comming ones, and the others, and others, and others...
And my mind is still dancing,
And the dance, is still growing.. in my heart.
Love U people.
Esta Casita me gusta más cuando estamos todos adentro porque paradójicamente vuela más liviana y las cosas parecieran no quedarse en el aire...
Abrazos a los compañeros, a los huéspedes, a los visitantes y a los coinquilinarios.
Grande grazie a tutti!!!
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